jueves, 26 de marzo de 2009

CONVOCATORIA AL ACTO DE HOMENAJE A LAS VICTIMAS LGTBI DEL FASCISMO

Un año más, el pueblo alicantino se une para conmemorar el final de un sueño, el final de la utopía de una España que se abría al mundo abrazándolo con el poder de la cultura, armada con la pluma de las y los literatos, exaltada en cantos de libertad y fraternidad. El final del sueño de la II República Española, símbolo de libertad y democracia.


Un año más nos reunimos en la explanada del puerto para homenajear a las víctimas de la represión fascista, a aquellos que encontraron en nuestra costa su último bastión de esperanza, a aquellos que con lágrimas en los ojos partían al exilio llevando en su corazón el recuerdo de aquellas y aquellos que murieron defendiendo la libertad contra el golpe del dictador Franco, llevando en su corazón a su tierra, una tierra que se sembraba de odio y represión a golpe de bayoneta, de tiro en la noche, de paseos hacia la muerte.


Por primera vez en la historia, en este año tan especial en que se conmemora el 70 aniversario del final de la fratricida Guerra Civil en nuestro puerto, último lugar invadido por la intolerancia, las Asociaciones provinciales de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales nos queremos unir a este homenaje visibilizando el dolor que aun hoy nos supone el asesinato de nuestro añorado García Lorca, el exilio de Cernuda y Miguel de Molina, el exilio de Gil Albert y tantos y tantas otras ciudadanas. El dolor que nos produce el exilio interior de las voces calladas, la represión de la cárcel de aquellos y aquellas que por amar a sus iguales fueron sometidos a escarnio, fueron hechos presos, sufrieron el peso de las botas de los ladrones de libertad que sometieron a nuestro país durante más de 40 años al miedo. El dolor que provocaron las leyes de “vagos y maleantes” y de “peligrosidad social” cuyas víctimas, a pesar de los avances, aun hoy sienten en sus corazones el daño de aquella vergüenza y merecen no ser olvidadas.


Lo hacemos con el corazón contrito y lleno de los recuerdos que, en forma de libros, voces, textos, versos o dibujos sobre cuartillas amarillas, por el paso del tiempo, nos legaron aquellas víctimas de la esperanza de una España para todos. Lo hacemos desde la felicidad que nos produce vivir en una España plural, una España en Igualdad. Lo hacemos desde el agradecimiento a aquellos países que refugiaron a las víctimas de la represión, que extendieron sus brazos para acoger a las y los ciudadanos que tuvieron que abandonar su tierra pues sobre ellos pendía el peso de la muerte o la prisión por sus ideas, por sus amores.


Lo hacemos desde la indignación ante quienes quieren borrar esa parte de la historia, de esa historia común que aún hoy se atreven a negar aquellos que debieran avergonzarse por negar el justo derecho de homenaje a las víctimas de la intolerancia.


Y lo hacemos porque consideramos justo y preciso que entre aquellos y aquellas que merecen todo nuestro recuerdo también se reconozca a los gays, las lesbianas, bisexuales y transexuales, transgéneros, travestis, que junto a todos y todas las soñadoras de libertad lucharon, murieron, sufrieron o se exiliaron huyendo del yugo de la muerte que supuso la dictadura fascista para todas y todos los ciudadanos y habitantes del estado español.


Desde los diferentes movimientos asociativos LGTBI os queremos convocar a acudir al acto que el próximo 29 de Marzo organizará la Comisión Cívica para la Recuperación de la Memoria Histórica en la explanada del puerto de Alicante a las 11:30 de la mañana. Os convocamos a todas y todos, jóvenes y mayores, a aquellos y aquellas que sufristeis la represión, a aquellos y aquellas que conocéis la historia por los libros, a aquellos y aquellas que os emocionáis con los versos de “Poeta en Nueva York” o recordando las palabras de Alberti, o leyendo a Max Aub. Os convocamos para que nos acompañéis a los movimientos LGTBI a portar nuestro homenaje en forma de flores contra el olvido, para llenar del color de la pluralidad LGTBI que hoy podemos defender desde la libertad alzando las banderas arcoíris por todas y todos aquellos que no lo pueden hacer ya, que no lo pudieron hacer entonces. Y por aquellos que aún, por temor, no lo hacen hoy presionados por el miedo que provoca un heterocentrismo formal, que es una forma de represión que aun padecen y padecemos y que es legado de la intolerancia de aquel pasado gris, aquel pasado que no hemos de olvidar, aquel pasado que nos ha de impulsar con mayor fuerza a unirnos y trabajar por borrar del presente las huellas de los años robados, las huellas del silencio cómplice.


Contamos con vosotr@s.


Organiza: Comisión Cívica para la Recuperación de la Memoria Histórica
Apoyamos: DecideT, Grupo LGTBI-UP, Suma Igualtat

La Comisión da la bienvenida a la familia Dickson




Representantes de la Comisión Cívica de Alicante dieron la bienvenida a esta ciudad de Alicante a los hijos del Capitán del Stanbrook Archibald Dickson.

En la mañana de ayer la Comisión Cívica de Alicante recibieron a Dorothea y Arnold Dickson a los que se les agradeció muy sinceramente el gesto de viajar hasta Alicante para participar en las Jornadas Internacionales sobre el final de la guerra civil en nuestra ciudad.

A lo largo de la charla Enrique Cerdán Tato, miembro de la Comisión Cívica y Cronista Oficial de la Ciudad, les expuso la relevancia histórica de aquellos momentos tan dramáticos sucedidos en el puerto de Alicante y el valor y agradecimiento que no sólo esta ciudad sino toda la España democrática le debe al Capitán Dickson y a toda la tripulación del mítico Stanbrook.

Dorothea y Arnold se mostraron emocionados y muy agradecidos a todos los que han mantenido a lo largo de estos setenta años la memoria de su padre y esperan poder transmitir este agradecimiento con su participación en la jornada del domingo día 29 de marzo en el acto que tendrá lugar en el puerto de Alicante.

Nuestras más sinceras gracias a ambos por su cordialidad, su cercanía y su interés en estas Jornadas.

La llegada a la ciudad de los hijos de Archibald Dickson ha sido el resultado de un arduo trabajo llevado a cabo por la Comisión Cívica de Alicante con la inestimable colaboración de Pablo Azorín Williams, colaboración que agradecemos muy sinceramente por el hito histórico que supone esta visita y los lazos de amistad y gratitud con la familia Dickson que de ella han surgido.


martes, 24 de marzo de 2009

El capitán del Stanbrook será homenajeado

El capitán del buque inglés "Stanbrook", último barco que partió del puerto de Alicante con refugiados republicanos al término de la Guerra Civil, será homenajeado durante las jornadas internacionales Recuperación de la Memoria Histórica, que se celebrarán del 27 al 29 de marzo en puntos de esta provincia.
EFE El periodista Enrique Cerdán Tato, miembro de la Comisión Cívica por la Recuperación de la Memoria Histórica, ha informado hoy en rueda de prensa que las jornadas cuentan con un "programa relevante, robusto y sólido".
Se rendirá homenaje el domingo 29 de marzo en Alicante a la tripulación del "Stanbrook" y a su capitán, el galés Archibald Dickson, que posibilitaron la salida de hasta tres mil refugiados republicanos de Alicante hacia la ciudad argelina de Orán, el día antes del fin de la Guerra Civil.
Los hijos del capitán asistirán al acto de conmemoración, que continuará con una conferencia del historiador Ian Gibson titulada "El final de la Guerra Civil".
Asimismo, el poeta Marcos Ana, que estuvo en el campo de hacinamiento de Los Almendros y posteriormente en el campo de concentración de Albatera, tras la Guerra Civil, presentará su libro "Decidme cómo es un árbol", donde narra los 23 años que estuvo preso en cárceles franquistas.
Las jornadas internacionales concluirán con una ofrenda floral en el puerto de Alicante, la "última resistencia republicana", a los exiliados y presos tras la guerra civil.
Para la financiación de las jornadas, la Comisión Cívica ha editado 150 carpetas con seis serigrafías sobre la memoria histórica, realizadas y cedidas por los periodistas Enrique Cerdán Tato y Manuel Vicent y los humoristas gráficos Forges, Peridis, El Roto y Romeu.

Rueda de Prensa 23/03/2009

La Comisión Cívica observa un cambio de postura en Castedo en torno a la memoria histórica
El proyecto del mercado que recuerda el bombardeo de Alicante durante la Guerra Civil podría ser una realidad el 25 de mayo de este año gracias al cambio de postura del Ayuntamiento de Alicante, según los miembros de la Comisión Cívica por la Recuperación de la Memoria Histórica.
EFE La encargada de los memoriales de la Comisión Cívica, Elena Albajar, se ha mostrado esperanzada hoy, durante la presentación de las Jornadas Internacional por la recuperación de la memoria histórica que tendrá lugar entre los días 27 a 29 de marzo, de que los tres proyectos previstos en Alicante salgan adelante.

"Para los 70 años del final de la guerra civil no va a haber nada, pero esperamos que cuando conmemoremos los 75 años estén los tres proyectos", ha indicado antes de añadir que tienen "un poco más de esperanzas" en la consecución de los memoriales.
El proyecto del Mercado, financiado por el ayuntamiento de la capital, ganó el concurso público por unanimidad, ha recordado Luis Pesquera, miembro de la Comisión Cívica, para quien el objetivo es hacer de Alicante "una ciudad democrática, recuerdo de aquel período".
En este sentido, Pesquera ha comparado el proyecto con "determinados movimientos retrógrados que se pueden ver por ejemplo en la Diputación de Castellón", en referencia a la publicación de un libro sobre la Guerra Civil que "niega el golpe militar de 1936".
La actuación en el Mercado Central prevé instalar en el pavimento del suelo de nueve placas de aluminio que representan los nueve aviones que bombardearon Alicante, con 90 puntos negros por cada una de las bombas que cayeron sobre la ciudad y mataron a más de 300 alicantinos.
Asimismo, las placas contarán con unos 300 agujeros rellenados con terminales de fibra óptica, que cada mediodía se iluminarán de color rojo durante 10 minutos para conmemorar a los fallecidos durante los bombardeos.
La segunda actuación, que Albajar ha calificado como "proyecto estrella", es una escultura del alicantino Eusebio Sempere que representa a "un pájaro emprendiendo el vuelo" y que se situaría entre el puerto y la Explanada, lo que le convertiría en un monumento "muy urbano" y "más cercano a los alicantinos".
La Comisión Cívica confiado en poder retomar este proyecto, que simboliza el exilio de miles de republicanos desde el puerto de Alicante, y que se encontraba parado a causa de una ordenanza de la junta de obras del puerto, que pretendía evitar "obras como ésta", ordenanza que en estos momentos se ha modificado.
Por último, pretenden la construcción de un memorial en el Campo de los Almendros, donde miles de republicanos estuvieron encerrados tras el final de la guerra, "que es el memorial que nosotros queremos y por el que pelearemos hasta el final", en palabras de Albajar.
El proyecto prevé la recuperación del campo de almendros que habían cultivados en esa zona, y la construcción de un "austero" banco de hormigón para sentarse teñido de morado y rojo.
Han lamentado la demora de la construcción del proyecto causada por la negativa municipal, que ha ocasionado la pérdida de la subvención total por parte de la Presidencia del Gobierno de España con una cuantía de 30.000 euros.
Por otro lado, los miembros de la Comisión Cívica han expresado su intención de proponer crear un centro de investigación y documentación sobre el franquismo y la represión franquista en el campo de concentración que hubo en la localidad de Albatera.
Diario Información (25/03/2009)

martes, 24 de febrero de 2009

Los almendros sin memoria

Cuando leí hace bastantes años La muerte de la esperanza, el magnífico libro testimonial de la Guerra de España del que es autor el periodista y escritor libertario Eduardo de Guzman (1908-1991) recuerdo haber seguido las incidencias de su segunda parte especialmente conmovido. Narra Guzman los últimos días del mes de marzo de 1939 en el puerto de Alicante, cuando miles de republicanos , una vez frustrada la posibilidad de escapar por barco de la represión franquista, fueron detenidos e internados en el campo de concentración de Los Almendros por las tropas sublevadas. La emotividad de esa lectura deriva de una de mis más arraigadas pesadillas de niñez, a propósito también de otra evacuación, ésta sí consumada, que tuvo lugar en los muelles del Musel de Gijón en el otoño de 1937 . Mi indiscreción infantil pagó caro haberme enterado de aquellos episodios por escuchar las charlas más clandestinas de los adultos, pues a las divertidas tardes de pesca que pasaba en el puerto solían seguirles por las noches oníricos epílogos lleno de zozobras. Nada me parecía más infausto que imaginar a centenares de niños y adolescentes -los que luego se llamarían Niños de la Guerra en México o Moscú- , separándose de sus padres entre lágrimas y abrazos, mientras las llamaradas de los depósitos de combustible de la ciudad , bombardeados por el ejército franquista , prestaban a esas dramáticas escenas un fondo de fantasmagórica madrugada.
Quedaba entonces mucha guerra por delante y era factible todavía poner una fecha no demasiado lejana a un posterior reencuentro familiar, que finalmente se demoraría demasiado o no llegaría nunca realizarse. Los internos recluídos en Los Almendros no tuvieron más expectativas que las del cautiverio o la muerte, porque la guerra había terminado con su derrota. De todo cuanto padecíeron quedó recreada constancia en la novela Campo de los Almendros, escrita por Max Aub y que no pocos críticos consideran como una de las mejores , si no la mejor, de las publicadas en el exilio (México , 1968). Abundando en las jornadas de desesperación y pánico vividas en el puerto de Alicante, de las que Guzmán da referencia testimonial en su libro, Aub completa con su magnífica prosa la aciaga perspectiva que se apunta en la última página de La muerte de la esperanza, cuando el periodista y escritor anarquista describe el suicidio de aquellos que no pueden o no quieren sobreponerse a la pesadumbre y decepción de la derrota: "Un momento los contemplamos en silencio . Luego echamos a andar lentamente hacia la salida . Camino maquinalmente , sin ver siquiera dónde piso. Frente a mi veo a los soldados que nos aguardan. Pienso en las ilusiones desvanecidas, en el ejemplo de cuantos cayeron en largo recorrido. Alguien murmura a mi lado:'Pronto envidiaremos a los muertos'. Asiento sin palabras. Es el primero de abril de 1939. ¡La guerra ha terminado!".
Hace ya casi cinco años que la Comisión Cïvica de Alicante para la Recuperación de la Memoria Histórica planteó al Ayuntamiento de la ciudad, gobernado por el Partido Popular, la solicitud de erigir un monumento conmemorativo que recordara el trágico fin de la contienda y a quienes padecieron la represión franquista en ese campo de concentración y otros recintos de la ciudad en unas condiciones tan penosas que, según el poeta Marcos Ana, impulsaban a los presos a comer flores y tallos tiernos ante la extrema precariedad de comida y agua. En noviembre de 2004 se creó la comisión municipal correspondiente para que el asunto fuera sometido a estudio. Dos años después y en vista de que la tal comisión no mostraba ningún indicio de actividad , la entidad solicitante reclamó una parcela de suelo público en Los Almendros para ubicar allí el pertinente memorial. Recibida incluso una subvención por parte del Gobierno central a tal efecto , esa subvención venció el pasado mes de marzo sin que la demanda de la Comisión Cívica fuera atendida por el Ayuntamiento.
El pasado 3 de febrero , coincidiendo con los 70 años de la atroz ratonera que supuso para unas 14.000 personas el puerto de Alicante, muchas de ellas significadas en la lucha por el régimen legítimo y constitucional de la II República , la Comisión Cívica de aquella ciudad presentó un manifiesto en el Ateneo de Madrid para "reparar una antigua injusticia, compensar una historia manipulada, combatir contra el olvido, saldar en definitiva una deuda moral que la democracia española sigue teniendo con quienes defendieron una España Tolerante, pacífica, culta y solidaria".
No se puede entender en la España actual que , mientras la Fundación Príncipe de Asturias de Oviedo concede un premio a la concordia al Museo del Holocausto hace un par de años o en La Jonquera se inaugura un museo en recuerdo de los españoles internados en el campo de concentración de Argelès , el señor alcalde de Alicante siga posponiendo en Los Almendros el monumento solicitado. Claro que tampoco se puede entender con la ley de memoria histórica vigente, que otro alcalde del Partido Popular, éste de Salamanca, mantenga a Francisco Franco como alcalde de honor de la ciudad, con su efigie tallada en piedra sobre las arcadas barrocas de la Plaza Mayor, y se niegue a rehabilitar a Unamuno como concejal republicano . ¿ De qué heridas nos habla esta gente cuando se refiere a la memoria que las reabre?. Las únicas heridas en una democracia que se precie son las de seguir rindiendo distinciones a quienes la combatieron y olvido a sus defensores. Herida es a considerar que en el Campo de los Almendros se plantara hace un año un almendro florido, a falta del memorial reclamado, y al día siguiente apareciera descuajado con la firma de una esvástica , enseña de la barbarie.
FÉLIX POBLACIÓN
Escritor y periodista del Centro Documental de la Memoria Histórica
Publicado en el diario PUBLICO el Domingo 22 de Febrero de 2009

martes, 17 de febrero de 2009

A miguel Gutiérrez , por la memoria histórica

A Miguel Gutiérrez , por la memoria histórica

El pasado viernes tuvo lugar un sentido homenaje al obrero del derecho como a él le gustaba llamarse, Miguel Gutiérrez Carbonell , ofrecido por compañeros, juristas y sobre todo amigos. Sin embargo , desde el mismo viernes y a pesar de que acudí y me emocioné como toda su familia , me persigue el inconfeso desasosiego de un compromiso incumplido. Tengo una deuda con Miguel que ho he saldado y que su expresión socarrona en las fotografías que ilustran el homenaje construído en papel por sus amigos, me ha traído a la memoria.
Mi deuda es antigua pero no demasiado; se remonta a apenas hace un año y medio, cuando elaboraba una necrológica afectiva que debía despedir la memoria de unquerido profesor de Arqueología , que había fallecido inopinada y prematuramente. Para Riccardo Francovich, como para toda una generación de intelectuales italianos nacidos inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, la 2ª República española y su derrota a manos del fascismo representaba un mito de progreso truncado, en el cual las miles de personas que quedaron abandonadas a su suerte -"lo mejor de españa"- en palabras de Max Aub- en el Puerto de Alicante, último bastión de la sitiada República ocupado precisamente por las fuerzas italianas , simbolizaban mejor que nada la poderosa magnitud de la derrota y el tremendo desastre que se cernía sobre Europa; por ello, Riccardo seguía con pasión nuestro debate sobre la memoria histórica.
En esa despedida aludía a la casualidad de que su muerte accidental se hubiera producido el 68 aniversario de la entrada en la ciudad de la división Littorio, y su despedida civil en Florencia coincidiera con otro acto cívico celebrado en Alicante, en recuerdo de los hombres y mujeres republicanos que capturados en el Puerto, fueron conducidos a un campo de prisioneros improvisados en unos bancales de almendros cercanos, y en el que el propio Miguel, como miembro de la Comisión Cívica para la Recuperación de la Memoria Histórica tomó la palabra. Mientras preparaba este texto llamé a Miguel para consultarle algunos datos relacionados con esos trágicos sucesos y aunque tenía prisa me los proporcionó por extenso, con la prodigalidad de verbo que le caracterizaba, poniéndome como única condición que le enviase el escrito. Así lo hice y días después me llamó para decirme que le había conmovido y confesarme de paso que con la edad se hacía cada vez más sensible a los reconocimientos dictados por el corazón, lo que él atribuía a la vejez y yo a su bonhomía. Bromeamos y yo le prometí que le haría una despedida similar , sin saber que muy pronto e igualmente de forma inopinada, también Miguel iba a ser requerido por sus compañeros a las "aladas almas de los almendros de nata" .
Ésta es mi deuda; no le hice esa despedida tan frívolamente prometida, ni tan siquiera cuando nos brindaron la oportunidad de participar en este último homenaje , en el que yo pensaba que correspondía a sus hijos y sus compañeros en la judicatura y las ideas tomar la palabra. Pero el caso es que siento que Miguel no me perdona la deuda y he querido saldarla de forma pública con estas líneas que no son, por más que lo parezcan, un homenaje a su memoria sino por ella.
Las preposiciones no son baladíes y este "por" se refiere a la vindicación de la memoria histórica por la que él , junto con otros y otras, luchó hasta el mismo día de su muerte. No hablamos de pasar facturas o ejercer revanchas, sino de algo tan simple como rescatar una memoria por la fuerza silenciada . En estos tiempos en que mi oficio de historiadora en la tierra ha debido poner a disposición de la historia -no la que habitualmente construimos desde la distancia de sus documentos textuales y materiales, sino aquella próxima y terrible que emana del derecho de los vivos a recordar a sus muertos - nuestras piquetas y pinceles , para desenterrar los restos materiales de una dolorosa por próxima contienda, me vienen constatemente a la cabeza los versos que Miguel Hernández dedicó a su amigo muerto y que acompañaron también a Miguel Gutiérrez en el homenaje del pasado viernes:
"quiero escarbar la tierra con los dientes, / quiero apartar la tierra parte / a parte a dentelladas secas y calientes / Quiero minar la tierra hasta encontrarte / y besarte la noble calavera / y desamordazarte y regresarte".
Porque de eso se trata , de desamordazar y regresar , no sólo a los muertos sino su memoria; del derecho a saber y recordar. Miguel, en nombre de la Comisión Cívica, reclamaba únicamente un espacio urbano que regresa y desamordazara la memoria , bajo la forma de un parque de alados almendros de nata. Murió sin lograrlo y todos los homenajes que sele han hecho no suplen el que esperamos y que no es en realidad un homenaje a su persona sino a la memoria de todos los hombres y mujeres que perdieron -con la vida o el silencio- su derecho a pensar lo que pensaban . Yo ya he cumplidomi deuda con mi tío Miguel escribiendo la despedida prometida. Nuestro Ayuntamiento aún tiene pendiente cumplir la suya , en el convencimiento de que su carácter democrático le hace heredero directo de aquella libertad de pensamiento que fue entonces silenciada. Lo contrario significa , a más de no cumplir su deuda para con todos los ciudadanos de Alicante, asumir una continuidad injustificable con aquellos que acabaron con la democracia en el campo de los almendros.
Sonia Gutiérrez Lloret
es catedrática de Arqueología de la Universidad de Alicante.
Artículo publicado en el diario INFORMACIÓN el Martes 17 de Febrero de 2009

lunes, 19 de enero de 2009

Miguel Ríos y la Comisión Cïvica de Alicante


"Quiero hacer llegar mi apoyo solidario a la Comisión Cívica para la recuperación de la Memoria Histórica de Alicante.

Amigos, vuestro trabajo dignifica la memoria de todo un pueblo al que arrebataron la libertad, y en muchos casos la vida, por defender sus derechos. Toda mi admiración a vuestra labor y a vuestro coraje."


Miguel Ríos.