martes, 24 de febrero de 2009

Los almendros sin memoria

Cuando leí hace bastantes años La muerte de la esperanza, el magnífico libro testimonial de la Guerra de España del que es autor el periodista y escritor libertario Eduardo de Guzman (1908-1991) recuerdo haber seguido las incidencias de su segunda parte especialmente conmovido. Narra Guzman los últimos días del mes de marzo de 1939 en el puerto de Alicante, cuando miles de republicanos , una vez frustrada la posibilidad de escapar por barco de la represión franquista, fueron detenidos e internados en el campo de concentración de Los Almendros por las tropas sublevadas. La emotividad de esa lectura deriva de una de mis más arraigadas pesadillas de niñez, a propósito también de otra evacuación, ésta sí consumada, que tuvo lugar en los muelles del Musel de Gijón en el otoño de 1937 . Mi indiscreción infantil pagó caro haberme enterado de aquellos episodios por escuchar las charlas más clandestinas de los adultos, pues a las divertidas tardes de pesca que pasaba en el puerto solían seguirles por las noches oníricos epílogos lleno de zozobras. Nada me parecía más infausto que imaginar a centenares de niños y adolescentes -los que luego se llamarían Niños de la Guerra en México o Moscú- , separándose de sus padres entre lágrimas y abrazos, mientras las llamaradas de los depósitos de combustible de la ciudad , bombardeados por el ejército franquista , prestaban a esas dramáticas escenas un fondo de fantasmagórica madrugada.
Quedaba entonces mucha guerra por delante y era factible todavía poner una fecha no demasiado lejana a un posterior reencuentro familiar, que finalmente se demoraría demasiado o no llegaría nunca realizarse. Los internos recluídos en Los Almendros no tuvieron más expectativas que las del cautiverio o la muerte, porque la guerra había terminado con su derrota. De todo cuanto padecíeron quedó recreada constancia en la novela Campo de los Almendros, escrita por Max Aub y que no pocos críticos consideran como una de las mejores , si no la mejor, de las publicadas en el exilio (México , 1968). Abundando en las jornadas de desesperación y pánico vividas en el puerto de Alicante, de las que Guzmán da referencia testimonial en su libro, Aub completa con su magnífica prosa la aciaga perspectiva que se apunta en la última página de La muerte de la esperanza, cuando el periodista y escritor anarquista describe el suicidio de aquellos que no pueden o no quieren sobreponerse a la pesadumbre y decepción de la derrota: "Un momento los contemplamos en silencio . Luego echamos a andar lentamente hacia la salida . Camino maquinalmente , sin ver siquiera dónde piso. Frente a mi veo a los soldados que nos aguardan. Pienso en las ilusiones desvanecidas, en el ejemplo de cuantos cayeron en largo recorrido. Alguien murmura a mi lado:'Pronto envidiaremos a los muertos'. Asiento sin palabras. Es el primero de abril de 1939. ¡La guerra ha terminado!".
Hace ya casi cinco años que la Comisión Cïvica de Alicante para la Recuperación de la Memoria Histórica planteó al Ayuntamiento de la ciudad, gobernado por el Partido Popular, la solicitud de erigir un monumento conmemorativo que recordara el trágico fin de la contienda y a quienes padecieron la represión franquista en ese campo de concentración y otros recintos de la ciudad en unas condiciones tan penosas que, según el poeta Marcos Ana, impulsaban a los presos a comer flores y tallos tiernos ante la extrema precariedad de comida y agua. En noviembre de 2004 se creó la comisión municipal correspondiente para que el asunto fuera sometido a estudio. Dos años después y en vista de que la tal comisión no mostraba ningún indicio de actividad , la entidad solicitante reclamó una parcela de suelo público en Los Almendros para ubicar allí el pertinente memorial. Recibida incluso una subvención por parte del Gobierno central a tal efecto , esa subvención venció el pasado mes de marzo sin que la demanda de la Comisión Cívica fuera atendida por el Ayuntamiento.
El pasado 3 de febrero , coincidiendo con los 70 años de la atroz ratonera que supuso para unas 14.000 personas el puerto de Alicante, muchas de ellas significadas en la lucha por el régimen legítimo y constitucional de la II República , la Comisión Cívica de aquella ciudad presentó un manifiesto en el Ateneo de Madrid para "reparar una antigua injusticia, compensar una historia manipulada, combatir contra el olvido, saldar en definitiva una deuda moral que la democracia española sigue teniendo con quienes defendieron una España Tolerante, pacífica, culta y solidaria".
No se puede entender en la España actual que , mientras la Fundación Príncipe de Asturias de Oviedo concede un premio a la concordia al Museo del Holocausto hace un par de años o en La Jonquera se inaugura un museo en recuerdo de los españoles internados en el campo de concentración de Argelès , el señor alcalde de Alicante siga posponiendo en Los Almendros el monumento solicitado. Claro que tampoco se puede entender con la ley de memoria histórica vigente, que otro alcalde del Partido Popular, éste de Salamanca, mantenga a Francisco Franco como alcalde de honor de la ciudad, con su efigie tallada en piedra sobre las arcadas barrocas de la Plaza Mayor, y se niegue a rehabilitar a Unamuno como concejal republicano . ¿ De qué heridas nos habla esta gente cuando se refiere a la memoria que las reabre?. Las únicas heridas en una democracia que se precie son las de seguir rindiendo distinciones a quienes la combatieron y olvido a sus defensores. Herida es a considerar que en el Campo de los Almendros se plantara hace un año un almendro florido, a falta del memorial reclamado, y al día siguiente apareciera descuajado con la firma de una esvástica , enseña de la barbarie.
FÉLIX POBLACIÓN
Escritor y periodista del Centro Documental de la Memoria Histórica
Publicado en el diario PUBLICO el Domingo 22 de Febrero de 2009

martes, 17 de febrero de 2009

A miguel Gutiérrez , por la memoria histórica

A Miguel Gutiérrez , por la memoria histórica

El pasado viernes tuvo lugar un sentido homenaje al obrero del derecho como a él le gustaba llamarse, Miguel Gutiérrez Carbonell , ofrecido por compañeros, juristas y sobre todo amigos. Sin embargo , desde el mismo viernes y a pesar de que acudí y me emocioné como toda su familia , me persigue el inconfeso desasosiego de un compromiso incumplido. Tengo una deuda con Miguel que ho he saldado y que su expresión socarrona en las fotografías que ilustran el homenaje construído en papel por sus amigos, me ha traído a la memoria.
Mi deuda es antigua pero no demasiado; se remonta a apenas hace un año y medio, cuando elaboraba una necrológica afectiva que debía despedir la memoria de unquerido profesor de Arqueología , que había fallecido inopinada y prematuramente. Para Riccardo Francovich, como para toda una generación de intelectuales italianos nacidos inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, la 2ª República española y su derrota a manos del fascismo representaba un mito de progreso truncado, en el cual las miles de personas que quedaron abandonadas a su suerte -"lo mejor de españa"- en palabras de Max Aub- en el Puerto de Alicante, último bastión de la sitiada República ocupado precisamente por las fuerzas italianas , simbolizaban mejor que nada la poderosa magnitud de la derrota y el tremendo desastre que se cernía sobre Europa; por ello, Riccardo seguía con pasión nuestro debate sobre la memoria histórica.
En esa despedida aludía a la casualidad de que su muerte accidental se hubiera producido el 68 aniversario de la entrada en la ciudad de la división Littorio, y su despedida civil en Florencia coincidiera con otro acto cívico celebrado en Alicante, en recuerdo de los hombres y mujeres republicanos que capturados en el Puerto, fueron conducidos a un campo de prisioneros improvisados en unos bancales de almendros cercanos, y en el que el propio Miguel, como miembro de la Comisión Cívica para la Recuperación de la Memoria Histórica tomó la palabra. Mientras preparaba este texto llamé a Miguel para consultarle algunos datos relacionados con esos trágicos sucesos y aunque tenía prisa me los proporcionó por extenso, con la prodigalidad de verbo que le caracterizaba, poniéndome como única condición que le enviase el escrito. Así lo hice y días después me llamó para decirme que le había conmovido y confesarme de paso que con la edad se hacía cada vez más sensible a los reconocimientos dictados por el corazón, lo que él atribuía a la vejez y yo a su bonhomía. Bromeamos y yo le prometí que le haría una despedida similar , sin saber que muy pronto e igualmente de forma inopinada, también Miguel iba a ser requerido por sus compañeros a las "aladas almas de los almendros de nata" .
Ésta es mi deuda; no le hice esa despedida tan frívolamente prometida, ni tan siquiera cuando nos brindaron la oportunidad de participar en este último homenaje , en el que yo pensaba que correspondía a sus hijos y sus compañeros en la judicatura y las ideas tomar la palabra. Pero el caso es que siento que Miguel no me perdona la deuda y he querido saldarla de forma pública con estas líneas que no son, por más que lo parezcan, un homenaje a su memoria sino por ella.
Las preposiciones no son baladíes y este "por" se refiere a la vindicación de la memoria histórica por la que él , junto con otros y otras, luchó hasta el mismo día de su muerte. No hablamos de pasar facturas o ejercer revanchas, sino de algo tan simple como rescatar una memoria por la fuerza silenciada . En estos tiempos en que mi oficio de historiadora en la tierra ha debido poner a disposición de la historia -no la que habitualmente construimos desde la distancia de sus documentos textuales y materiales, sino aquella próxima y terrible que emana del derecho de los vivos a recordar a sus muertos - nuestras piquetas y pinceles , para desenterrar los restos materiales de una dolorosa por próxima contienda, me vienen constatemente a la cabeza los versos que Miguel Hernández dedicó a su amigo muerto y que acompañaron también a Miguel Gutiérrez en el homenaje del pasado viernes:
"quiero escarbar la tierra con los dientes, / quiero apartar la tierra parte / a parte a dentelladas secas y calientes / Quiero minar la tierra hasta encontrarte / y besarte la noble calavera / y desamordazarte y regresarte".
Porque de eso se trata , de desamordazar y regresar , no sólo a los muertos sino su memoria; del derecho a saber y recordar. Miguel, en nombre de la Comisión Cívica, reclamaba únicamente un espacio urbano que regresa y desamordazara la memoria , bajo la forma de un parque de alados almendros de nata. Murió sin lograrlo y todos los homenajes que sele han hecho no suplen el que esperamos y que no es en realidad un homenaje a su persona sino a la memoria de todos los hombres y mujeres que perdieron -con la vida o el silencio- su derecho a pensar lo que pensaban . Yo ya he cumplidomi deuda con mi tío Miguel escribiendo la despedida prometida. Nuestro Ayuntamiento aún tiene pendiente cumplir la suya , en el convencimiento de que su carácter democrático le hace heredero directo de aquella libertad de pensamiento que fue entonces silenciada. Lo contrario significa , a más de no cumplir su deuda para con todos los ciudadanos de Alicante, asumir una continuidad injustificable con aquellos que acabaron con la democracia en el campo de los almendros.
Sonia Gutiérrez Lloret
es catedrática de Arqueología de la Universidad de Alicante.
Artículo publicado en el diario INFORMACIÓN el Martes 17 de Febrero de 2009

lunes, 19 de enero de 2009

Miguel Ríos y la Comisión Cïvica de Alicante


"Quiero hacer llegar mi apoyo solidario a la Comisión Cívica para la recuperación de la Memoria Histórica de Alicante.

Amigos, vuestro trabajo dignifica la memoria de todo un pueblo al que arrebataron la libertad, y en muchos casos la vida, por defender sus derechos. Toda mi admiración a vuestra labor y a vuestro coraje."


Miguel Ríos.

lunes, 12 de enero de 2009

Un paso para salir del olvido

12/01/2009 DIARIO INFORMACION

SESENTA AÑOS DESPUÉS DEL HOLOCAUSTO
Un paso para salir del olvido
La Comisión para la Recuperación de la Memoria Histórica de Alicante buscará a los hijos de fallecidos en campos de concentración nazis para que se beneficien de una indemnización del Gobierno francés
A. PRADO
Los descendientes directos de los españoles que murieron en campos de concentración nazis tienen derecho a cobrar una indemnización que el Gobierno francés decidió conceder hace unos años a los huérfanos de aquellos refugiados españoles republicanos que fueron deportados desde Francia bajo la ocupación alemana a los campos de exterminio. Ante el desconocimiento general de esta iniciativa, algunas organizaciones cívicas de recuperación de la memoria histórica han empezado a preocuparse de facilitar información a aquellas familias que pueden beneficiarse de esta ayuda, como ya sucede en Murcia y como prevé hacer la comisión de Alicante.
De los cerca de 7.500 españoles que fueron trasladados al campo de concentración de Mauthausen y a subcampos como el de Gusen, considerado la puerta al infierno, más de 5.000 murieron en sus instalaciones. De ellos, al menos 113 eran republicanos de la provincia de Alicante, según una relación de fallecidos del Centre d'Estudis d'Investigació Histórica del Baix Maestrat/ Montsià (CEIBM), que manejan colectivos dedicados a la memoria histórica.
A partir de este listado, la Comisión Cívica para la Recuperación de la Memoria Histórica de Alicante se ha interesado en abordar este asunto y tiene previsto tratar de localizar a los familiares de los fallecidos para proporcionarles información acerca de la indemnización que ofrece el Gobierno francés. Manuel Parra, miembro de este colectivo en Alicante, afirma que "vamos a trabajar este tema para intentar contactar o hacer un llamamiento a los familiares, para facilitarles información y que puedan reclamar esas indemnizaciones".
Parra, que ya se ha puesto en contacto con el Consulado de Francia, señala que hoy se tratará este asunto en una reunión de la comisión, ya que "parece que la documentación es compleja, que debe certificarse a través de Cruz Roja Internacional, y está dirigido a aquellos que tenían menos de 18 años cuando su padre falleció en alguno de los campos".
Desde el Consulado General de Francia en Madrid confirmaron estos datos, aunque no especificaron la cuantía de la indemnización, y señalaron que esta entidad actúa como intermediaria en la información y recepción de las solicitudes, que remiten al Ministerio de Defensa francés para su resolución. En Murcia, la Asociación de Amigos de los Caídos por la Libertad ya ha recibido una decena de peticiones de familias de fallecidos, "aunque sólo en dos casos son de hijos, que es lo que requiere el Gobierno francés, con la dificultad que ello tiene, ya que muchos de los que murieron allí eran jóvenes y no tenían descendencia".
En esta región, la Delegación del Gobierno se ha ofrecido a dicha asociación para colaborar en esta tarea. El presidente de la asociación murciana, Floren Dimas, apunta que se trata de una única indemnización establecida en 6.000 euros, y recuerda que los gobiernos de Alemania y Austria también crearon ayudas similares, "lo que supone un reconocimiento oficial de su condición de víctimas, mientras que el Gobierno español, sin embargo, no los ha reconocido como tales, sólo los cita en el preámbulo de la Ley de Memoria Histórica, pero en el articulado en el que se habla de reconocimientos y reparaciones, no se vuelve a hablar más del asunto".Por su parte, el miembro de la Comisión para la Recuperación de la Memoria Histórica de Orihuela, Ginés Saura, conocedor del listado de fallecidos del CEIBM señala que incluso intentaron contactar con algunos familiares en la Vega Baja sin éxito.
Saura añade que la búsqueda de esos familiares "es un tema que tenemos pendiente y que queremos retomar a partir de las próximas jornadas que celebraremos sobre el campo de concentración de Albatera". No obstante, apunta que están a la espera de cotejar los datos con otro listado incluido en un libro editado por el Ministerio de Cultura sobre españoles en campos de concentración nazis, que se encuentra agotado.De la relación de víctimas del CEIBM -todos ellos varones y algunos con poco más de 20 años- la mayoría murió en el campo de Gusen, dependiente del central de Mauthausen y a 4 kilómetros de distancia, donde se produjo un alto porcentaje de exterminios. De los cerca de 5.000 republicanos españoles que perdieron la vida en este complejo, al que fueron enviados la mayor parte de los republicanos españoles, un 80% falleció en "el moridero" de Gusen.
FALLECIDOS DE LA PROVINCIA DE ALICANTE EN CAMPOS DE CONCENTRACIÓN NAZIS
Albatera
Ballesta Martínez, Antoni 1942/09/03 Gusen 1910/12/12
Berna Quinto, Miquel 1941/11/07 Gusen 1902/02/08
Alcoy
Català López Emili 1941/01/15 Gusen 1903/03/22
Cortés Faus, Jordi 1941/12/10 Gusen 1900/04/25
Grau Ibàñez, Francesc 1942/05/12 Gusen 1917/03/12
Jordà Santamaria, Josep 1941/12/25 Gusen 1913/05/17
Linares Gisber, Joaquim 1941/12/11 Gusen 1908/08/31
Marquès Aracil, Emili 1941/04/01 Gusen 1908/07/07
Montagut Ferrer, Vicent 1941/11/18 Gusen 1905/04/19
Montllor Berenguer, Rafael1941/09/22 Gusen 1916/02/19
Payà Rumbau, Emeteri
(o Palla Rumbeu, Eleuterio)1941/03/22 Gusen 1891/02/28
Pérez Alemany, Ernest 1941/09/14 Gusen 1908/04/12
Reig Llopis, Antoni 1941/07/03 Gusen 1896/04/10
Sirera Domènech, Antoni 1941/10/27 Gusen 1902/10/08
Alcosser
Egea García, José 1941/09/27 Gusen
Pérez Jordà, Eduard 1941/10/17 Gusen 1897/05/21
Alicante
Aparicio Leon, Josep 1942/01/01 Gusen 1920/03/24
Blasco Blasco, Pasqual 1941/07/31 Gusen 1890/10/26
Estévez Fuentes, Ramon 1941/12/03 Gusen 1899/12/24
Guillèn Rubio, Vicent 1941/11/14 Gusen 1910/10/06
Jover Pérez, Daniel 1941/11/08 Gusen 1907/07/15
Llobregat Serra, Manuel 1941/12/28 Gusen 1917/04/15
Marc Vives, Artur(o Mera Vives, Arturo) 1941/07/15 Gusen 1906/04/29
Ramos Torres, Jaume 1942/01/01 Gusen 1919/07/25
Rodríguez Llinares, Rafael 1942/02/09 Gusen 1919/02/03
Rubió Sànchez, Francesc 1942/02/09 Gusen 1917/08/24
Rusó Mulet, Vicent 1941/10/28 Gusen 1914/06/20
Sancho Garcia, Antoni 1942/01/16 Gusen 1913/05/03
Tortosa González, Leopold 1941/12/29 Gusen 1913/03/23
Verdú Soler, Jaume 1941/11/06 Gusen 1914/03/08
Altea
López Ripoll, Joan 1942/09/17 Gusen 1912/12/05
Aspe
Botella Pavia, Josep 1941/09/23 Gusen 1905/02/26
Banyeres de Mariola
Albero Puertas, Enric 1941/12/19 Gusen 1908/08/08
Ferrer Berenguer, Enric 1941/01/06 Mauthausen1889/12/31
Callosa d'En Sarrià
Seguí Savall, Jaume 1942/03/22 Gusen 1918/02/28
Callosa de Segura
Martínez Flores, Francesc 1942/01/13 Gusen 1907/10/04
Campo de Mirra
Mas Francès, Santiago 1941/10/03 Gusen 1900/05/01
Cañada de Benejama
Barceló Soler, Francesc 1941/09/23 Gusen 1898/06/21
Castalla
Bernabeu Pérez, Victorià 1941/09/01 Gusen 1904/06/04
Chivert Ruiz, Josep 1941/08/04 Gusen 1900/06/05
Jordà Rico, Leopold 1942/04/27 Mauthausen 1899/07/10
Catral
Costa Navarro, Manuel 1942/11/02 Mauthausen 1910/05/23
Pardo Lázaro, Josep 1942/11/18 Gusen 1909/05/29
Cox
Marín Bernabeu, Francesc 1942/02/10 Gusen 1919/04/04
Crevillent
Aznar Galipiense, Eleuteri 1941/11/15 Gusen 1917/04/18
Pons Galvany, Manuel 1941/09/07 Mauthausen 1911/12/16
Quesada Sánchez, Antón 1941/10/26 Gusen 1903/07/02
Daya
Andreo Rodríguez, Manuel 1941/02/18 Gusen 1913/02/18
Dénia
Crespo Vengut, Jaume 1942/04/21 Mauthausen 1892/02/15
Ramis Grimal, Josep 1944/04/03 Mauthausen 1897/08/13
Vives Rosselló, Asensi 1941/11/26 Gusen 1896/04/14
Dolores
Fiñana Larosa, Miquel(O Filió Larva, Miquel) 1941/11/01 Gusen
Elda
Amat Pérez, Manuel 1942/01/21 Gusen 1908/08/03
Gonzàlez Sirvent, Josep 1941/08/10 Gusen 1897/09/05
Leal Rico, Lluís 1941/09/18 Gusen 1906/06/04
Elx
Agulló Quirant, Antoni 1942/02/10 Gusen 1918/02/18
Campello Agulló, Josep 1941/10/14 Gusen 1907/10/27
Garcia Sànchez, Josep 1942/01/21 Gusen 1914/06/06
Gómez Garcia, Francesc 1941/11/14 Gusen 1917/12/03
Martínez Caves, Jaume 1941/09/26 Gusen 1902/07/25
Martínez Gilabert, Pasqual 1941/09/22 Gusen 1899/05/17
Martínez Gómez, Jaume 1941/09/26 Dachau 1907/07/25
Rizo Torres, Antoni 1941/11/17 Gusen 1915/03/02
Rodríguez Blasco, Ramón 1941/10/25 Gusen 1907/09/14
Tomàs Brotons, Josep 1941/12/11 Gusen 1918/12/23
Granja de Rocamora
Fernández Martínez, Joan 1941/11/10 Gusen 1911/07/11
Ibi
Pina Pérez, Antoni 1941/12/08 Gusen 1909/07/27
Monóvar
Alansó Monzó, Joan 1941/07/07 Gusen 1904/02/16
Gil Amorós, Joan 1941/08/11 Gusen 1903/11/14
Guardiola Santa, Lluís 1941/09/02 Gusen 1908/07/19
Poveda Bellet, Demetri 1941/05/05 Gusen 1910/12/25
Poveda Grau, Josep 1941/07/12 Gusen 1900/03/08
Sànchez Boterra, Romà 1945/01/24 Gusen 1901/03/11
Muro de Alcoi
Calatayud Bas, Joaquim 1941/09/29 Gusen 1910/05/23
Carbonell Nicolàs, Antoni 1942/01/15 Gusen 1908/12/23
Tomàs Magino, Vicent 1942/01/06 Gusen 1910/09/15
Novelda
Navarro Escolano, Antoni 1941/07/24 Gusen 1894/06/01
Onil
Vicent Berenguer, Ferran 1941/06/01 Gusen 1905/04/29
Orihuela
Bascuñana Garcia, Ramon 1941/11/01 Gusen 1914/12/01
Blasco Hidalgo, Josep 1941/12/09 Gusen 1896/02/26
Cano Cano, Jesús 1941/12/08 Gusen 1916/11/11
Mestre Mestre, Josep 1942/01/02 Gusen 1913/05/04
Pardines Torres, Jesús 1941/11/29 Gusen 1907/01/01
Rogel Aparicio, Antoni 1941/09/22 Gusen 1916/05/16
Pedreguer
Carrió Marsal, Josep 1941/10/26 Gusen 1910/04/10
Pego
Cerver Morell, Josep 1941/11/18 Gusen 1917/03/19
Sendra Escribà, Vicent 1941/10/20 Gusen 1910/03/14
Sendra Morell, Andreu 1941/11/19 Gusen 1908/02/15
Sendra Sendra, Carles 1941/10/05 Gusen 1904/07/02
Penáguila
Llorens Ortiz, Miquel 1942/01/14 Gusen 1900/09/05
Mullor Català, Manuel 1941/01/27 Gusen 1913/06/13
Petrer
Amorós Maestre, Josep 1941/07/04 Gusen 1886/05/21
Pinoso
Deltell Prats, Xavier 1941/11/18 Gusen 1911/11/15
Falcó Dura, Rafael 1944/03/21 Gusen 1915/10/05
López Gràcia, Josep 1941/11/27 Gusen 1903/03/07
Payà Lara, Heliodor(o Palla Lara, Eliodoro) 1941/09/10 Gusen 1901/02/02
Planes de la Baronía
Cervelló Bay, Miquel 1941/04/02 Gusen 1914/02/13
Quatretondeta
Vercher Cortell, Alvar 1942/01/15 Gusen 1917/10/07
Rafal
Arqués Hurtado, Antonio 1941/08/06 Gusen 1914/08/13
Parres Villaescusa, Agustí 1941/09/28 Gusen 1915/08/13
Redován
Cartagena Ballesta, Manuel1941/11/29 Gusen 1911/04/25
Relleu
Pamplona Lladó, Vicent 1941/04/23 Gusen 1901/10/10
Rojales
Carbonell Figueroa, Felip 1942/01/06 Gusen 1911/09/03
Fernández Garrí, Manuel 1941/12/09 Gusen 1904/01/03
Navarro Chezarras, Antoni 1941/12/19 Gusen 1902/09/02
San Miguel de Salinas
Gracia Sánchez, Manuel 1941/12/05 Gusen 1916/06/21
Sant Vicent del Raspeig
Santana Orts, Francesc 1941/03/10 Gusen 1914/08/29
Tibi
Morató Feliu, Emili 1941/09/02 Gusen 1901/10/17
Torremanzanas
Vano Verdú, Josep 1942/01/06/ Gusen 1911/09/17
Torrevieja
Paredes Úbeda, Josep 1941/11/14 Gusen 1905/01/02
Villena
Pilar Meneses, Àngel del 1941/09/29 Gusen 1918/02/02
Xàbia
Cardona España, Bartomeu1941/11/09 Gusen 1919/02/23
Xixona
Cots Xirvent, Francesc(O Cota Sirvent, Francisco) 1942/12/19 Gusen 1908/02/14

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Comunicado de la Comisión sobre el "Auto del Juez Garzón"

Comunicado de la Comisión Cívica de Alicante para la Recuperación de la Memoria Histórica sobre el Auto del Juez Garzón.

Sea cual sea el final del proceso iniciado por el juez Baltasar Garzón en relación con las víctimas del franquismo ha de reconocérsele, al menos, la virtud de evidenciar aspectos de trascendental importancia en nuestra historia que aún permanecen sin clarificar; entre ellos el carácter de golpe de estado parcialmente fracasado que tuvo la sublevación militar de Francisco Franco y el problema vergonzaosamente irresuelto de las fosas de los asesinados por los sublevados contra el gobierno legítimo de la República, evidenciando así las deficiencias y limitaciones de la denominada Ley de la Memoria Histórica.

Desde la Comisión Cívica de Alicante para la Recuperación de la Memoria Histórica, más allá de las cuestiones relacionadas con el ámbito jurídico procedimental, queremos manifestar que cuando están a punto cumplirse los setenta años del final de la guerra a la que dio lugar el relativo fracaso del levantamiento militar, es imprescindible que nuestros gobernantes asuman las responsabilidades que como máximos dirigentes de una sociedad democrática les corresponde , de tal modo que aquellos partidos y entidades sociales cuyas responsabilidades en la represión fascista son evidentes sean públicamente señalados, así mismo es responsabilidad gubernamental proceder a las justas reparaciones de los asesinados y represaliados y de sus descendientes, anulando, en primer lugar los simulacros de injustos juiciios en los que fueron condenados.

Suscriben este comunicado todos los componentes, partidos políticos, centrales sindicales y artistas plásticos que componen la Comisión Cívica de Alicante para la Recuperación de la Memoria Histórica.

jueves, 27 de noviembre de 2008

Ley de la Memoria Histórica

Justicia abre una vía 'online' para obtener la declaración de reparación a los perseguidos en la guerra y el franquismo

El Ministerio de Justicia ha abierto una vía 'online' para solicitar la Declaración de reparación y reconocimiento personal de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil y la Dictadura, un derecho recogido en el artículo 4 de la Ley de Memoria Histórica aprobada por el Congreso de los Diputados el pasado 26 de diciembre de 2007, informaron fuentes del Departamento que dirige el Ministro Mariano Fernández Bermejo.

A través de un 'banner' habilitado en la página web del Ministerio, www.mjusticia.es, dedicado a la Ley de Memoria Histórica, el interesado puede realizar su solicitud de forma telemática acreditando su identidad a través de un certificado digital, como por ejemplo el de Clase 2 CA de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, o el DNI electrónico.

El solicitante deberá aportar una copia impresa del justificante obtenido al realizar la petición, la documentación acreditativa de los hechos, las certificaciones y las resoluciones alegadas. En el caso de que el interesado no sea el mismo afectado, tendrá que adjuntar además la documentación acreditativa del parentesco entre ambos y remitirla, junto con lo anterior, al Registro General del Ministerio de Justicia.

Este procedimiento electrónico, que no excluye la modalidad presencial, garantiza el máximo respeto a la protección de datos de carácter personal.

La Declaración, aprobada como Real Decreto por el Consejo de Ministros el pasado 31 de octubre, "constituye un reconocimiento del derecho individual de reparación moral y de recuperación de la memoria personal y familiar a quienes durante la Guerra Civil y la Dictadura padecieron persecuciones, condenas, sanciones o cualesquiera otras formas de violencia personal por razones políticas, ideológicas o de creencia religiosa, entre otras", dice el Ministerio.

Pueden solicitarla los directamente afectados y, en caso de fallecimiento, los cónyuges o similares, ascendientes, descendientes y colaterales hasta segundo grado, así como las instituciones públicas en las que hubieran desarrollado un cargo relevante. De su tramitación se encargará la División de Tramitación de Derechos de Gracia y otros Derechos, órgano dependiente de la Subsecretaría de Justicia. La resolución, cuyo plazo es de seis meses, corresponderá al propio titular del departamento.

La Declaración no supone, en ningún caso, el reconocimiento de responsabilidad patrimonial del Estado ni de cualquier Administración Pública, ni da lugar a efecto, reparación o indemnización de índole económica o profesional. Sin embargo, será plenamente compatible con cualquier otra fórmula de reparación prevista en el ordenamiento jurídico.

NACIONALIDAD A HIJOS Y NIETOS DE EXILIADOS

Por otra parte, ante la inminente entrada en vigor, el próximo 28 de diciembre, de la disposición adicional séptima de la Ley de Memoria Histórica que reconoce la opción a adquirir la nacionalidad española a los hijos y nietos de emigrantes exiliados durante la Guerra Civil y la Dictadura, los interesados tienen publicada en el BOE y en la web del Ministerio de Justicia, a partir de hoy, la Instrucción elaborada por la Dirección General de Registros y Notariado que fija el procedimiento a seguir.

La solicitud, cuyo modelo puede descargarse a través de la página web del Ministerio, podrán presentarla las personas cuyo padre o madre hubiese sido originariamente español y aquellas cuyo abuelo o abuela, hubiese perdido o tenido que renunciar a la nacionalidad española como consecuencia del exilio.

En cualquier caso, el plazo para formalizar la petición es de dos años desde la entrada en vigor de la disposición adicional séptima --es decir, antes del 29 de diciembre de 2010--, ampliable durante otro año más mediante acuerdo de Consejo de Ministros.

La solicitud se realizará ante el encargado del registro civil español (municipal o consular) correspondiente al lugar del domicilio del interesado, acompañada de otra serie de documentos, detallados en la Instrucción, que consisten básicamente en certificaciones literales de nacimiento, tanto del solicitante como de uno de sus progenitores españoles y, en el caso de los nietos, del abuelo o abuela españoles.

Dichas certificaciones registrales españolas también podrán pedirse en los registros civiles, municipales o Consulares, para su tramitación por vía electrónica a través de la página web del Ministerio de Justicia a partir del día 5 de diciembre de 2008.

Si al presentarse la solicitud de nacionalidad no se acreditan los requisitos exigidos, el optante estará obligado a completar la documentación en el plazo de treinta días naturales desde que se le requiera. En caso de denegación de la petición, podrá interponerse recurso ante la Dirección General de los Registros y del Notariado y en las representaciones diplomáticas u oficinas consulares de España en el extranjero.

BRIGADISTAS INTERNACIONALES

Asimismo, la web del Ministerio ofrece la posibilidad de descargar el modelo de solicitud para requerir la nacionalidad española para brigadistas internacionales, un derecho que, como novedad, se podrá ejercer sin límite de plazo, frente a los tres años que fijaba la legislación anterior.

Este derecho, recogido en un Real Decreto aprobado por el Consejo de Ministros del 31 de octubre, desarrolla el artículo 18 de la Ley de Memoria Histórica que reconoce de nuevo y de un modo singularizado la labor de los brigadistas y amplía su derecho a la nacionalidad española eliminando el requisito de tener que renunciar a la suya anterior.

La última de las normativas, que también ha publicado hoy el BOE, es la Instrucción sobre el acceso a la consulta de los libros de defunciones de los Registros Civiles, disponible también en www.mjusticia.es

En cumplimiento de la disposición adicional octava de la Ley de Memoria Histórica, con esta Instrucción se pretende despejar las dudas que puedan suscitar en los encargados de los registros civiles las peticiones de información registral para el desarrollo de investigaciones científicas e históricas enmarcadas en el periodo de la guerra civil, el franquismo, el exilio y la transición.

Así, la Instrucción combina la publicidad del Registro Civil y el derecho de acceso a los fondos documentales depositados en los archivos públicos, si bien subraya que existen casos de publicidad restringida que afectan a la intimidad personal y familiar. También exige a los poderes públicos la adopción de medidas necesarias para la protección, la integridad y catalogación de los documentos, especialmente en los casos de mayor deterioro o riesgo de degradación.


Más información en: http://leymemoria.mjusticia.es/paginas/es/declaracion_reparacion.html

lunes, 24 de noviembre de 2008

Angel Viñas : Alicante


Lo que oigo acerca de las dificultades con el Ayuntamiento de Alicante para dar su preceptivo permiso con el fin de que la comisión cívica para la recuperación de la memoria histórica pueda instalar tres monumentos conmemorativos en aquella hermosa ciudad me llena de pesadumbre y me inspira una reflexión.


Pesadumbre porque en estos años en que se ha recordado el LXX aniversario de la guerra civil, la gran fractura de la historia y de la sociedad españolas contemporáneas, las autoridades municipales alicantinas no parecen dispuestas a que ni siquiera se honre mínimamente a las victimas, ya fuesen inocentes (las de los bombardeos) o soldados vencidos.


Reflexión porque es algo sintomático de un talante y de un cierto desconocimiento del pasado. En lo que se refiere a lo primero, ¿piensa acaso el Ayuntamiento que en un régimen democrático se borrará algún día el recuerdo de los años de plomo y de venganza? Y en lo que se refiere a lo segundo, ¿cree acaso el Ayuntamiento que los historiadores no desentrañaremos el sentido último de aquella contienda fratricida?, ¿que la historia que estamos construyendo no desmontará los mitos que propagaron los vencedores?, ¿qué no se respaldará jamás la tesis de que Franco se las apañó para dilatar y extender la guerra a fin de matar “rojos” y domeñar a sus generales, aunque fuese al coste de innumerables víctimas de su propio bando?


El Ayuntamiento de Alicante parece olvidar el dicho evangélico de que la verdad hace libres. También que los historiadores no solemos ser condescendientes con quienes impiden su conocimiento.
Angel Viñas
Catedrático de la UCM